Prisionera

 Poema basado en un caso policial.

En un lugar profundo en donde yo me encontraba, en donde yo caminaba,en donde yo, en donde...

Ya no hay un donde, y tampoco un yo,  prefiero pensar en que fue algo sobre natural, si fui alguien, ya no lo soy, ya no importa.

Un viaje, una caminata, un paseo, un camping, una familia, un instante de felicidad o cotidianidad es lo que nos distancia de la tragedia.

Cosas que acomodar, momento de descanso, relajación, pero desde eso ya nadie lo está, nadie quiere saber más sobre la verdad de ese chico, a nadie le importa, aunque mis papás me esperan, pero no pueden hacer nada, yo no puedo hacer nada.

Soy prisionera de mi propia consciencia ahora, desearía que todos al menos lo supieran, desaparecí, dejé de ser a metros de mi hogar, dejé de vivir unos momentos después. Desearía que simplemente sepan qué fue de mí.

No quiero ser como las gotas de algo que se evaporiza, no quiero ser algo que se esfuma sin un por qué, quiero que al menos sepan que sufro, quiero que sepan que no dejé de ser de la nada, que ya era alguien, aunque no lo sabían, quiero que me encuentren,  no puedo ser una simple desaparecida, no quiero serlo.

Manos sujetan, manos aprietan.

Hay algo en mí que siempre me incomoda, pero no puedo saberlo, alguien más lo puso en mí,  no es propio de mí; la oscuridad en mi personita llena de luz.

Un instante de felicidad me separa de la desgracia, y el instante ya ocurrió.